(POLÍTICA PARA MI).- El presidente Donald Trump dijo este martes que desea una legislación que proteja de la deportación a los Dreamers y que sea una “ley de amor”.
“Esto debería ser un proyecto de ley bipartidista. Debería ser una ley de amor, verdaderamente una ley de amor, si lo podemos lograr”, exclamó el mandatario.
Pero el presidente insistió en su condición de que la legislación para los cientos de miles de jóvenes inmigrantes que despojó del programa de Acción Diferida para los Llegados Durante La Infancia, conocido como DACA, incluya los fondos para la construcción del muro y mayores recursos para la seguridad fronteriza.
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Tras una reunión con legisladores republicanos y demócratas sobre inmigración, Trump dijo que confía en que puede llegar a un acuerdo sobre cómo proteger a los más de 800 mil jóvenes inmigrantes que se beneficiaban del programa DACA.
“Tenemos algo en común: nos gustaría ver que esto se logre”, declaró el mandatario al reunirse en la Casa Blanca con 25 miembros del Congreso.
“Espero que encontremos una respuesta para DACA”, añadió.
Sin embargo, su fórmula de “amor” para los Dreamers, sigue incluyendo una mayor seguridad fronteriza y restricciones migratorias.
REFORMA MIGRATORIA
Trump pareció respaldar además un amplio acuerdo de inmigración que eventualmente otorgue a millones de inmigrantes indocumentados un camino hacia la ciudadanía.
El magnate aseguró que incluso estaría dispuesto a ser atacado políticamente por un enfoque que muchos de sus partidarios de línea dura ven como inaceptable.
Trump sugirió que la situación migratoria de millones de inmigrantes se resuelva en dos fases. Una vez que se solucione el tema de DACA, el presidente sostuvo que podría iniciarse el debate para legalizar al resto de los indocumentados.
“La (reforma migratoria) integral será la fase dos. Aprobaremos esto y después nos metemos con la (reforma) integral al día siguiente”, indicó Trump. ”
Trump ha solicitado al Congreso $18 mil millones para construir el muro en la frontera con México y reparar algunas de las vallas ya existentes.
“No necesitamos un muro de 2,000 millas. No necesitamos un muro donde hay ríos y montañas”, sostuvo el presidente.
