El caso de una niña de 10 años con parálisis cerebral, mexicana e indocumentada en Texas, que podría ser deportada, causó conmoción.
Mientras es atendida en el hospital de Corpus Christi, a donde la llevaron para atender un problema de la vesícula, Rosa María Hernández corre el riesgo de deportación sin poder reunirse a sus familiares en Laredo, Texas donde reside.
Desde Corpus Christi, reporteros ofrecieron los últimos detalles del caso en Marcia Responde.