(POLÍTICA PARA MI).- El anuncio de que el célebre grupo de danza Rockettes se presentará durante la inauguración del presidente Donald Trump ha suscitado una polémica en las redes sociales.
La controversia surge a la vez que se informó que el único ex presidente que hasta el momento ha confirmado su presencia en el día de la juramentación presidencial ha sido Jimmy Carter.

James Dolan, presidente ejecutivo de The Madison Square Garden Company, confirmó el jueves que el icónico grupo de danza femenina se presentará en la inauguración de Trump el 20 de enero.
Pero al menos una de las integrantes del grupo ha expresado su “decepción” ante el hecho de que el sindicato que representa a las Rockettes las está obligando a actuar en la inauguración.
En un mensaje de Instagram, que ya ha sido borrado, la bailarina Phoebe Pearl escribió: “El descubrir que se ha decidido por nosotras que la Rockettes se presentarán en la inauguración presidencial me hace sentir avergonzada y decepcionada”.
ESPANTOSO
“Las mujeres con las que trabajo son inteligentes y están llenas de amor y la decisión de actuar por un hombre que defiende todo lo que estamos en contra es espantoso”, agregó la Rockette, que finalizó su mensaje con #notmypresident.
Según la publicación BroadwayWorld, el sindicato de las Rockettes, American Guild of Variety Artists, AGVA, envió un correo electrónico en el que les informa que las bailarinas que están empleadas a tiempo completo están “obligadas” a actuar a pesar de sus creencias políticas.
“Cualquier conversación de boicotear este evento es inválida, me temo “, escribió un administrador del AGVA en un correo electrónico a las Rockettes que fue obtenido por BroadwayWorld.
Este es un incidente más en la serie de problemas que enfrentan los organizadores de las festividades de la inauguración por conseguir artistas de renombre que participen en los eventos del próximo 20 de enero.
Ya Andrea Bocelli, Elton John, Garth Brooks y Céline Dion han rehusado hacerlo.
En cuanto a los ex presidentes, fuentes cercanas a Bill Clinton informaron que todavía está pensando si debe acudir a la inauguración. George W. Bush tampoco ha confirmado su asistencia.